La Rueda
del Año es el calendario que usamos los wiccanos para afirmar la vida, invocar
a los dioses, rogar sus bendiciones y alinearnos a la Naturaleza. Este
calendario está compuesto por 8 fiestas sagradas (llamadas
<<aquelarres>> o <<sabbats>>).
Cuatro de estas fiestas
son de origen centroeuropeo, y celebran el culmen de cada estación. Y las otras
cuatro marcan los Solsticios y Equinoccios. Los nombres de las 8 fiestas tienen
su origen en los pueblos célticos, germánicos y escandinavos precristianos, y
actualmente se conocen por los siguientes:
Yule. Alban Arthan, Solsticio de Invierno. 21-22 Diciembre
(Hemisferio Norte) o 21 de Junio (Hmisferio Sur).
Imbolc. Día de Brighith, La Candelaria. 1-2 de Febrero
(Hemisferio Norte) o 1 de Agosto (Hemisferio Sur).
Ostara. Albar Eilir, Equinoccio de Primavera. 20 de Marzo
(Hemisferio Norte) o 21 de Septiembre (Hemisferio Sur).
Beltaine. Fiesta de las Flores, Primero de Mayo. 1 de Mayo (Hemisferio Norte) o 31 de Octubre
(Hemisferio Sur).
Litha. Alban Heruin, Solsticio de Verano. 21 de Junio
(Hemisferio Norte) o 21 de Diciembre (Hemisferio Sur).
Lughnasadh. Las Bodas de Lug, Lammas, La Primera
Cosecha, Fiesta del Pan. 1 de Agosto (Hemisferio Norte) o 1-2 de Febrero
(Hemisferio Sur).
Mabón. Alban Elfed, Herfest, La Segunda Cosecha,
Equinoccio de Otoño. 21-22 de Septiembre (Hemisferio Norte) o 20 de Marzo
(Hemisferio Sur).
Samhaín. La Tercera Cosecha, Noche Ancestral, Fiesta de los
Muertos, Halloween. 31 de Octubre (Hemisferio Norte) o 1 de Mayo (Hemisferio
Sur).
En su
conjunto, las 8 fiestas celebran el ciclo estacional con sus cambios y dramas.
En sí misma, la Rueda del Año es una gráfica moderna creada a finales del siglo
XIX, pero las fiestas que la componen son antiquísimas, precristianas, y vienen
a rescatar la manera que tenían los antiguos de celebrar la vida.
Se piensa
que los Sabbats más antiguos son Imbolc, Beltaine, Lughnasadh y Samhaín. Estas
fiestas se denominan <<Sabbats Mayores>> y marcan el culmen de cada
estación. Las fiestas de los Equinoccios y Solsticios se denominan
<<Sabbats Menores>>, y fueron incorporados a la Rueda a finales del
Siglo XIX. Se incluyeron por su importancia natural, pues marcan el comienzo
oficial de cada estación. Algunos autores cuentan que los Equinoccios y
Solsticios también son antiguos, ya que los estudios demuestran que se
celebraban hace milenios por los pueblos megalíticos de Europa y Oriente
Próximo.
Cuando
analizamos las 8 fiestas de la rueda, nos damos cuenta de que su base está en
el paganismo de Europa y Oriente Próximo. Las fiestas tienen reminiscencias
agrícolas y solares, y siguen el curso estacional asociado a la fertilidad de
la tierra, la vegetación y la vida animal. Actualmente la Rueda del Año tiene 8
fiestas principales y estas son las que celebramos los wiccanos. Nadie sabe
cuando comenzaron a celebrarse por primera vez, pero se sospecha que ya se
hacía hace más de cuatro mil años.
El
calendario de la Rueda no tiene comienzo ni fin como el calendario moderno
-basado en números-, porque está vinculado al ciclo natural. Pero si tuviéramos
que escoger el fin del calendario, sería Samhaín, que representa la muerte. Por
eso muchas brujas celebran el 31 de Octubre con el fin del año.
Te diré,
que en la comunidad wiccana a cada una de las fiestas se las denomina
<<sabbat>>, palabra de origen hebreo que significa
<<descanso>>. La palabra <<sabbat>> se usó para
identificar las fiestas paganas (a modo de insulto) por parte de la Iglesia
Católica, y desde entonces se utiliza para identificar las fiestas.
Curiosamente, a pesar de la injuria, la comunidad pagana sigue usándola para referirse
a las fiestas de la rueda.
Otra
palabra que usamos para identificar los festivales sagrados es
<<aquelarre>>, palabra de origen vasco que significa <<prado
del cabrón>>. Esta palabra viene a expresar el paraje natural donde se
reunían los paganos para celebrar sus fiestas y honrar a los Antiguos Dioses.
Aunque las palabras <<sabbat>> y <<aquelarre>> no
tienen nada que ver con el paganismo original, lo cierto es que actualmente se
usan para denominar nuestras fiestas.
Te diré,
que además de pertenecer a la Wicca, la Rueda del Año también la siguen otras
religiones paganas por su belleza y sintonía con la Naturaleza. Debido a que
las 8 fiestas marcan el ciclo del <<nacimiento>>,
<<crecimiento>>, <<apareamiento>>,
<<esplendor>>, <<maduración>>, <<muerte>> y
<<renacimiento>> de la vida, muchas personas han adoptado la rueda
para ajustar sus prácticas devotas y mágicas. Lo bueno de celebrar la rueda es
que hacerlo te alinea a las fuerzas naturales y al ciclo planetario. Cuando
celebras las fiestas de la Tierra estás afirmando el ciclo evolutivo de la
vida. Estás conectándote a los Antiguos Dioses y comulgando con el Espíritu de
la Naturaleza. Celebrar los Sabbats te permite rescatar las antiguas
costumbres, esas que ya practicaban los pastores, ganaderos y agricultores de
la antigüedad.
Si te resulta complejo entender la Rueda del Año, ten presente que los antiguos vivían de la tierra, y era natural que celebraran la vida de acuerdo al ritmo estacional. Antiguamente nuestros ancestros estaban conectados a la Madre Naturaleza y sabían que ella era la expresión de la divinidad. Este concepto les permitió sentir su energía, vivir en sintonía con el campo y alinearse a las fuerzas de la creación. Para alinearse y honrar a estas fuerzas, los antiguos celebraban bailes y hogueras, presentaban ofrendas y rendían culto a los Antiguos Dioses.
Aunque no hay demasiados textos sobre el antiguo paganismo y sus prácticas, algunas costumbres han permanecido en el folclore y la cultura popular. La tradición del 1º de Mayo, las <<Hogueras de San Juan>>, <<El Árbol de Navidad>>, <<La Noche de los Muertos>> y otras fiestas de gran peso social, proceden del paganismo. Estas costumbres siguen presentes en el pueblo porque en esencia expresan conceptos sagrados que sacuden nuestro interior y nos invitan a celebrar la vida.
Aunque parezca que la Rueda del Año sigue el tiempo de forma lineal o cíclica, en realidad es como una espiral de evolución. Todo en la Naturaleza cambia, se modifica, evoluciona, por eso la rueda nunca es igual. Habrá años donde sentirás que Yule es diferente y aunque el ritual que celebres sea el mismo, tal vez tu conciencia cambie, porque la propia vida es evolución.
Los
wiccanos practicamos una religión basada en la antigüedad pero sabemos que la
historia no ha de ser motivo de encorsetamiento. La historia nos alimenta,
nutre, inspira, pero sabemos muy bien que vivimos en el mundo presente, actual.
Por eso muchos de nosotros nos inspiramos en el pasado pero también diseñamos
nuevas prácticas religiosas adaptadas a nuestro tiempo. Y es natural que así
sea, pues la vida evoluciona por sí misma.
Celebrar
las fiestas de la rueda es algo que nos enriquece, alienta y consuela. También
nos ayuda a equilibrar nuestra energía y a ser más conscientes de nuestra
propia evolución, Los paganos actuales celebramos las fiestas de la rueda como
una forma de conectar con los Antiguos Dioses, desarrollar nuestro espíritu y
armonizarnos.
Si lo deseas, tú puedes celebrar estas fiestas y sentir el poder de la magia en tu espíritu. Cuando celebras la Rueda del Año te unificas a la corriente estacional, armonizas tus sentidos y honras a tus antepasados. También activas los dones del alma y estos se traducen en mayor conciencia Así pues ¿por qué no lo intentas?
Sabio y Bendito seas
El Brujo Shiva
No hay comentarios:
Publicar un comentario